miércoles, 15 de febrero de 2012

La memoria de los muertos

El chip Zoë, un implante de memoria, se coloca en el cerebro cuando naces, y su misión es grabar absolutamente toda tu vida. Cuando mueres, esa grabación se edita en una "rememorización" de todo lo sucedido, como una película que se muestra en tu funeral con las piezas unidas por un montador. Juguete para los privilegiados, los chips Zoë están cambiando la interacción de los humanos, pues saben que están siendo grabados, pero algunos se oponen a dicha tecnología emergente, pues creen que los recuerdos están hechos para desvanecerse con el tiempo. Alan Hackman (Robin Williams) es el mejor editor del mercado, gracias a su habilidad para abstraerse de los pecados de sus clientes, por lo que es muy demandado en la poderosa profesión de ser el editor final de los recuerdos de las personas. Sin embargo, su talento para ver la vida de otros sin emoción alguna le ha hecho un hombre distante, incapaz de experimentar la vida real en primera persona. Un día, recortando los recuerdos de un colega, Alan descubre una imagen de su infancia que le ha perseguido toda su vida, un descubrimiento que le llevará a un intensa búsqueda de la verdad y la redención



Interesante película que propone un buen debate moral. Imaginaos por un instante que esa nueva invención, ese chip, existiera y grabara absolutamente toda nuestra vida (íntima y no íntima) para después de morir producir una cinta que visionara todo el mundo en nuestro funeral... ¿No os parece intrigante?

No hay comentarios:

Publicar un comentario